Los jóvenes del último año de colegio se han reunido hoy frente a las facultades de Zaragoza. Muchos de ellos apurando el último cigarro y otros leyendo y releyendo los apuntes. Empieza la selectividad.
Todos hemos sufrido esos tres horribles días en los que los nervios nos hacen temblar como gelatina. Pero conseguimos sobrevivir a ella, al igual que los que les toca este año.
Todos hemos sufrido esos tres horribles días en los que los nervios nos hacen temblar como gelatina. Pero conseguimos sobrevivir a ella, al igual que los que les toca este año.
"Estoy muy nerviosa", "no me va a salir bien", "¿qué creéis que caerá?", son las típicas frases que se pueden oír paseando entre los grupos de adolescentes reunidos ante la puerta de la facultad de Ciencias Sociales.
Los profesores intentan tranquilizarlos, pero sin éxito. Los alumnos miran y remiran sus apuntes repasando en el último minuto. "¡Ay, madre mía!" dicen algunos.
Sólo quiero decirles que no es tan complicado, que todos hemos pasado por eso y aprobado. Sólo son tres días de sufrimiento y luego toca la fiesta en Salou. Desde aquí darles el mayor de los ánimos.